En 2018 se cumplirán dos décadas del último Gran Premio de la Argentina de Fórmula 1. Sin bien por el momento no se conocen negociaciones oficiales para que nuestro país vuelva al calendario de la Máxima, sí se sabe del interés del gobierno nacional por recuperar la fecha.
Hay varios síntomas para ilusionarse, como el repentino interés de la Ciudad de Buenos Aires por mejorar el Autódromo Oscar y Juan Gálvez, escenario de las 21 ediciones realizadas del GP argento.
“Tanto desde el Ministerio como de las provincias siempre buscamos captar más eventos. En ese marco lo último que se anunció fue la llegada del Mundial Superbike a San Juan. La realidad es que el objetivo de ir por más está siempre. Argentina tiene el potencial para ser sede de la mayor cantidad de eventos posibles, por lo que siempre vamos a estar trabajando en ese aspecto”, dijo Fernando García Soria, subsecretario de promoción del Ministerio de Turismo de la Nación.
El funcionario descartó la existencia de tratativas con Liberty Media, la empresa que maneja los destinos de la F-1 desde fines del año pasado; aunque reveló que sí hubo contactos informales. “Sí hemos hablado… Yo, personalmente, lo he hecho con gente que sabe del tema para saber cuáles son las cosas que se necesitan o no, pero siempre de manera informal”, aclaró.
“Sabemos que para traer a la Fórmula 1 habría que trabajar mucho y no solamente en lo referido a la infraestructura deportiva, sino también en todo lo que rodea al evento”, agregó el salteño sobre lo que es uno de los grandes objetivos de la actual administración nacional.
En el último lustro el retorno de la F-1 al país se transformó en una cuestión de Estado. Tal es así que en marzo de 2012, la entonces presidenta Cristina Fernández aseguró públicamente que la categoría iba a volver en 2013 en un circuito callejero en Mar del Plata. En ese entonces la Máxima tenía como mandamás al inglés Bernie Ecclestone, quien ante el fracaso del proyecto aseguró meses después del anuncio de CFK que el GP de la Argentina volvería al calendario “cuando tratemos con gente seria”.
La realización de un GP no es algo fácil ni barato. De hecho, para acondicionar el autódromo porteño a las exigencias de la Fórmula 1 se requiere una inversión de más de 50 millones de dólares. A eso hay que sumarle el canon por la realización de la fecha, que podría llegar a ser de unos 20 millones de dólares (al menos eso es lo que paga en la actualidad Brasil).
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