Toyota reveló los primeros datos de la segunda generación del Toyota Mirai, su berlina de pila de combustible de hidrógeno que añade un tercer depósito de este elemento para incrementar un 30% su autonomía, alcanzando los 650 kilómetros.
Durante el proceso de desarrollo del nuevo Mirai, Toyota apostó por la introducción de mejoras generalizadas para aumentar el atractivo del modelo, desde sus prestaciones a su imagen.
“Una de las prioridades ha sido mejorar su autonomía con relación al modelo de primera generación e ir más allá de las distancias que se suelen cubrir con vehículos eléctricos de batería. Su mayor potencia y capacidad de almacenamiento de hidrógeno, su eficiencia superior y su mejor rendimiento aerodinámico contribuyen a incrementar la autonomía alrededor del 30%”, han subrayado desde la compañía.
Su diseño estructural también ha mejorado gracias a su desarrollo sobre la plataforma modular GA-L de Toyota, que equipan modelos como el Lexus LS y que permite una disposición más eficiente y equilibrada del nuevo sistema de propulsión.
Así, la altura del modelo se ha reducido unos 6,5 centímetros, hasta los 1,47 metros, mientras que la distancia entre ejes se ha incrementado en 14 centímetros, hasta los 2,92 metros. La longitud del vehículo alcanza los 4,97 metros.
Por todo ello, Toyota espera una mayor penetración en el mercado de este modelo, hasta multiplicar por diez el volumen de ventas en los próximos años.
“Ese crecimiento se fundamentará en el rendimiento superior y el mayor atractivo para los clientes del nuevo modelo, en gran parte por resultar además un vehículo más asequible, con un precio de venta alrededor de un 20% inferior”, ha sentenciado la marca.
